Sí, las lesiones graves o mal tratadas pueden ocasionar discapacidades permanentes. Daños en huesos, tendones o nervios pueden limitar el rango de movimiento, la fuerza y la destreza fina. Esto puede impactar no solo en el ámbito laboral, sino también en las actividades de la vida diaria.
Incluso lesiones aparentemente menores pueden generar problemas crónicos si no se tratan de manera adecuada. Por eso, la intervención temprana es clave para reducir los riesgos de una discapacidad a largo plazo.
En el Badia Hand to Shoulder Center , los especialistas se enfocan en preservar la función y la calidad de vida de cada paciente mediante tratamientos avanzados y personalizados.