Verónica S.

Otro médico de Nueva York, donde vivo actualmente, me remitió al Dr. Badia. Me diagnosticaron un caso raro de enfermedad de Keinbock del semilunar, en una etapa muy avanzada, y después de hacer varias visitas a especialistas en el área de Nueva York, casi me di por vencido hasta que escuché sobre el Dr. Badia. Observó mi caso y consideró todos los factores, incluida mi edad y nivel de actividad, para elegir el nivel de intervención quirúrgica menos invasivo. Han pasado más de 9 meses desde mi cirugía y acabamos de tener una visita de seguimiento: ¡no necesito una segunda cirugía! Además, el personal y las instalaciones del hospital son del más alto nivel y están en un nivel completamente diferente al de un hospital público estándar. Esta fue una buena experiencia en general, a pesar de que fue mi primera (¡y última!) cirugía. ¡¡Gracias!!